Por: Alex
Concretar citas a ciegas por medio del messenger, chats o cualquier avance tecnológico que les permita guardar el anonimato y poder describir a un personaje que sólo existe en su imaginación.
El único riesgo que corren es que les pidan una fotografía o en el peor de los casos que conecten su webcam, pero no se preocupen pueden argumentar que no poseen una o arreglar una imagen que hayan bajado de internet con photoshop...
Otra de las actividades predilectas es seducir a lo que se mueva, llámese animal, persona o cosa.
Lo importante es satisfacer aquéllos apetitos que han dejado pendientes por la carencia de vida social...
Se pueden pasar horas enteras al pendiente de nuevas entradas, comentarios o charlas de su blog más odiado.
Aguardan pacientes a que alguna victima se acerque para usar las palabras más vulgares de su repertorio...
Probablemente esas oportunidades no lleguen tan pronto, es posible que en esos "tiempos muertos" se dediquen a otras "actividades productivas", como verificar quién se fusila los artículos, las faltas de ortografía en las publicaciones, revisar sus múltiples cuentas de correo electrónico o buscar lo más avanzado en bloqueo de cuentas y novedades de virus.
No es necesario dormir, la luz de la luna es su eterna compañera en aquéllas noches de acecho, de cualquier forma no tienen a donde más ir porque carecen de amigos y su lema es: "¿Quién necesita amigos y vida social?...mientras tenga a mi amada computadora y conexión a internet, ¡que el mundo gire!"
En la siguiente imagen se muestra claramente el comportamiento del Troll promedio:
Frecuentemente están en busca de alimento, algo que los haga sentir vivos e invencibles.
La recomendación para que se alejen es que no logren su objetivo, que simplemente no los alimenten y no hagan caso a sus "ataques".
Para finalizar es la primera y última vez que les dedico tiempo, la única finalidad es que entiendan que no los quiero aquí, vayan a molestar a otro lado, en este blog solo nos divertimos, pasamos momentos agradables y sobre todo dejamos a un lado la vida cotidiana.
Si tienen una opinión que valga la pena, háganla saber y si no, los invito a que ya no entren nuevamente.
¡Hasta nunca Troll!
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