noviembre 22, 2007

LA HISTORIA DEL COMIC MEXICANO PARTE 1


La historieta del recuerdo
El cómic mexicano en especie en extinción?

Hola Marvelites, esta ocacion dedicaremos este blog a la historia del comic en nuestro pais.

Nada es eterno, las imágenes se desvanecen, los demonios han cambiado de color y las voces ya no tienen la misma consistencia. El cómic mexicano clásico es una especie en extinción o como muchas otras expresiones de los adentros se ha convertido en una voz subterránea.

La época de oro

En aquellos días cuando la televisión todavía no se convertía en el pariente incómodo de cualquier familia, en aquellos días cuando la radio era la voz de nuestros fantasmas y el cine era una experiencia mágica, en los puestos de periódicos levantados en cada esquina se podían encontrar las historietas, las clásicas historietas mexicanas, donde desfilaban los tonos oscuros de Lágrimas y risas, las historias cadavéricas de Mitos y leyendas mexicanas, la historia del negro sobajado pero feliz de Memín Pinguín, el humor rabioso de La familia Burrón, las inverosímiles aventuras de Rolando el Rabioso y los cuentos matemáticos de Los Supersabios, además de todos aquellos cómics traídos desde el norte, como Archie, La pequeña Lulú,Spiderman y los personajes de Walt Disney.

Los primeros desparpajos del cómic mexicano se dan a principios del siglo pasado, cuando Juan Bautista Urrutia creó las historietas de la fábrica de cigarros El Buen Tono, que tenían por objeto persuadir a los lectores a consumir su producto. Era 1904 cuando nacían estas historietas, se presentaban en cinco o seis series autoconclusivas, que eran publicadas en los principales diarios de la época como El Imparcial, El Mundo Ilustrado, El Universal, Excélsior y El Demócrata.
Para 1922, el mismo autor creó una serie llamada Ranilla, que también se publicaba en los diarios de la época. En este caso, el protagonista es un muchacho pueblerino que nace en la provincia mexicana y emigra al Distrito Federal donde entra en contacto con la inalcanzable aristocracia. Y a pesar de carecer de un apellido de alcurnia, su hábito de fumar lo hace salir avante de las diferentes situaciones que enfrenta.

Ya en la década de los 30, hacen su aparición las revistas Pepín, Chamaco y Pinocho, que reproducían las historietas estadounidenses y además integraban algunas mexicanas. De acuerdo con los números de esos tiempos, a la semana se llegaban a imprimir hasta cinco millones de ejemplares, entre nacionales y extranjeras, por lo que se le llamó la época de oro.
En 1947, surgía una publicación semanal llamada Memín Pinguín, donde se narraban las desventuras de un niño negro y de su madre que a la mínima provocación amenazaba con una zoquetiza que al final se convertía en besos y arrumacos. Un año después doña Borola, don Regino y toda la fauna de La familia Burrón hacía acto de aparición y los enormes cigarros de papel de Doña Borola se hicieron parte de los mexicanos que se convertían en animales urbanos. Un poco más tarde, para los años 50 y 60, salieron a la luz historias como las de Hermelinda Linda, Los Supersabios, Chanoc, Kalimán y Lágrimas, risas y amor; esta última se convirtió en un fenómeno que contaba los avatares de personajes amorosos, canallescos o venidos de lugares paradisíacos como la curvilínea y enigmática "Rarotonga". Las estadísticas de esos ayeres marcan que publicaciones como Kalimán y Lágrimas y risas rebasaban por mucho el millón de ejemplares vendidos cada semana. Fantomas, la amenaza elegante se deja ver en 1966 y sus aventuras eran seguidas por todos aquellos que veían a la televisión como un bicho raro, aquellos que hacían de la calle el escenario natural de sus minutos.

Cada viernes el ritual se repetía. En el puesto de periódicos se exhibía el nuevo número de Lágrimas y risas, donde la historia de un tipo que era conocido como "El canalla" adornaba las páginas de tono sepia de la publicación. Se trataba de un individuo malo como pocos, de mirada intensa y desafiante, golpeado por la vida y dispuesto a vengarse de todos aquellos que le habían jugado a la mala. La revista pasaba primero por las manos maternas, paternas, los hermanos más grandes y al final era engullida por los menores. Algunos lectores de la época recuerdan que "El canalla" era el tipo de moda; los más malos de la cuadra se habían ganado el apodo de "El canalla".

Historietas familiares

El cómic o la historieta mexicana se convirtió en la fuente de lecciones de vida a seguir. Los virtuosos triunfaban al final, los malosos recibían su castigo ejemplar, hasta los rateros se redimían como "Ruperto Tacuche", de La familia Burrón, historieta donde doña Borola soñaba con ser rica, tener una criada llamada Jennifer, como la de su amiga "Cristeta", y no tener que hacer milagros para darle de comer a su prole. El mundo parecía menos complicado, no había por qué buscar los tonos oscuros o malignos alrededor de las historias.

Los estudiosos señalan que la historieta se convirtió en otro factor en favor de la unión familiar cuando la televisión todavía no invadía las intimidades, y en muchos casos asumió un papel de educadora y de forjadora de un extraño hábito a la lectura. Se documentan casos en los cuales los analfabetas atraídos por los dibujos aprendieron a leer y se dejaron cautivar por los embustes de la hermosa y maléfica "Rubí". Otro punto en favor era el reducido costo de las revistas que costaban, por ejemplo, diez centavos, cuando el salario mínimo era de cinco pesos diarios.

"La historieta mexicana es impecable, está bien hecha, los argumentos responden a una serie de peculiaridades del mexicano, digamos La familia Burrón, Los Agachados, Hermelinda Linda. Esta historieta netamente mexicana propone un forma de ser de lo que podríamos denominar como mexicano. Son muy creativas, imaginativas, el humor es muy particular y de ahí su popularidad", afirma la académica María Eugenia Chellet, coautora del libro Mitos y monitos, editado por la UNAM. Más allá de los tirajes que podían rebasar el millón de ejemplares y de que los editores obtenían ganancias respetables, los dibujantes y argumentistas tenían que multiplicarse para mal ganarse la vida. Al respecto, don Rubén Lara, creador de Fantomas, señala: "La historieta siempre ha estado mal pagada y el dibujante es difícil que pueda mejorar su calidad cuando tiene que realizar historietas en tiempos cortos. Esa combinación es la que ha dado al traste con la historieta mexicana que en realidad es un fenómeno que está afectando a toda la historieta mundial, pero desde luego a nosotros nos está yendo peor que en otras latitudes".

De aquel esplendor de la historieta, don Sixto Valencia Burgos, creador del dibujo de Memín, recuerda las reglas impuestas: "Había algunas reglas que se debían respetar a la hora de dibujar, por ejemplo, no podía dibujar muy frondosas a las chamacas, no debía verse el pechoOtra particularidad era que intentábamos estrenar palabras, es decir, palabras que no eran tan usuales en el vocabulario, las metíamos al argumento y las explicábamos a los lectores dentro de la historieta". Lo que podríamos llamar la época de plata de la historieta mexicana se extendió hasta los años 70. En los puestos de cada esquina circulaba Chanoc y sus estrafalarios personajes donde pululaban una especie de cavernícolas que vivían empeñados en tumbar aviones a golpe de rocazos. Además, el fenómeno derivado de Lágrimas, risas y amor tomaba gran fuerza, y personajes como "Rarotonga" se convertían en la inspiración de los sueños platónicos de la tribu de adolescentes que crecía en la ciudad de México. La isla misteriosa donde habitaba la voluptuosa morena era el tema que carcomía las imaginerías de cómo sería estar con una mujer así.

Conquistas de la historieta

Años más tarde, "Rarotonga" sería llevada al cine. La seudo vedette Gloriella, rellenita por los silicones, no llenaba las expectativas, la escenografía de cartón-piedra que pretendía ser la isla del enorme mito causaba humor involuntario y el actor Raúl Ramírez, quien quiso ser el doctor que caía ante los embrujos de "Rarotonga" no conmovió a nadie. El personaje aún danza en los recuerdos y arranca más que algunos suspiros.

De los responsables de Lágrimas, risas y amor también surgió una historieta que tuvo como nombre Fuego, en la cual se contaba la lucha por la independencia de lo que hoy se llama Haití. Con los típicos excesos de dramatismo, se narraban las cruentas historias de quienes lucharon contra la ocupación francesa en la isla y la historieta se convirtió en un gran fenómeno de ventas.
Manelick de la Parra, presidente y director general de Grupo Editorial Vid, hijo de Yolanda Vargas Dulché, autora de grandes éxitos como Lágrimas y risas, habla de lo que significó esta historieta: "La suma es que son historias románticas, bonitas, positivas, donde el personaje central se abre camino a base de esfuerzo y se impone ante la adversidad, pues obviamente hizo que Lágrimas y risas fuera un parámetro a seguir".

Otra de las piedras angulares de la historieta mexicana antes de su debacle fue Kalimán. En 1965, teniendo como referencia que la radionovela donde se narraban las aventuras de este héroe era todo un éxito, un grupo de dibujantes y argumentistas se dio a la tarea de darle rostro y voz impresa. En poco tiempo, Kalimán se convirtió en un gran negocio, los tirajes llegaron a rebasar los dos millones y su fulgor se extendió hasta bien entrada la década de los 70. "Serenidad y paciencia, mi pequeño Solín", se convirtió en una frase que era usada por más de uno ante situaciones complejas.

A la par de las historias propicias para la bondad y el final feliz, surgió en la década de los 60 una historieta que rompió esquemas y que se valió de la crítica política para ganar un buen número de seguidores. Encabezados por "Rius", un grupo de desfachatados dio vida en primera instancia a Los Supermachos. De golpe y porrazo aparecieron personajes como "Calzonzin Inspector", "El Licenciado Trastupijes" y "Nopalzin Reuter", entre otros demonios que se dedicaron a diseccionar la realidad nacional en un pueblo perdido en la provincia. Más tarde llegaron Los Agachados y además de los problemas nacionales y en un tono bastante pedagógico se explicaban temas internacionales, se retomaban las luchas sociales y se buscaba acercar al lector a las tesis del socialismo. "Rius" también aprovechó el espacio para hablar del vegetarismo, para tronar contra la comida chatarra y ponderar la cura con yerbas.

Y la historieta se desdibuja

La televisión se convirtió en un obstáculo difícil de sortear. Las telenovelas, los programas musicales, de comicidad y la transmisión de los deportes hicieron de la mal llamada "caja idiota", el pariente incómodo de muchos hogares mexicanos y cada vez más. Telesistema Mexicano y más tarde Televisa, comandados por Emilio Azcárraga, se transformaron en un poder muy cercano a los planteamientos del rumbo del país. El noticiero 24 Horas informaba sólo lo que al gobierno le convenía; hechos de sangre como el 68 y el jueves de Corpus de 1971 fueron editados al estilo de la amistad que mantenían Televisa y el régimen priista; el país era un verdadero paraíso donde pasaba nada.

La década de los 70 puede ser marcada como el inicio del boom de la televisión por su abaratamiento. La transmisión a todos los rincones del mundo de los Juegos Olímpicos de 1968 dejó muy bien parada la capacidad tecnológica de Telesistema Mexicano. Azcárraga Milmo tenía derecho de picaporte en Palacio Nacional. En pocos años, la televisora se empezó a dar el lujo de crear estrellas y, cuando quisiera, también dejarlas en el olvido. La televisión no tenía competencia, el cine entró en una crisis que todavía no termina de superar, la radio mantenía su nicho de seguidores y las historietas poco pudieron hacer ante el avance de los televisores.



Gracias a José Antonio Olvera y Humberto Tapia por su colaboracion para este articulo.

Hasta la proxima Marvelites.

CONTINUARA...........
POR CIERTO CUAL ES TU COMIC MEXICANO FAVORITO Y CUALES CONOCES?

15 comentarios:

Anónimo dijo...

guey no mams Esta con madre este articulo,Esta chingon el blog,
Saludos desde la sultana del norte.

Anónimo dijo...

BRAVO BRAVISISISIMO. SOBERVIO, A MIS 39 AÑOS Y AUN APLAUDO ARTICULOS, SIGAN ASI CHAVOS VAN BIEN CON ESTA PAGINA.

Anónimo dijo...

hola andaba en la red buscando un articulo para mi hermano y me encontre con esta pagina tan cool, felicidades....van a 10000 x hora..un abrazo.

Anónimo dijo...

ESTA LARGO PERO INTERESANTE Y TODASVIA FALTA MAS?

NO JUEGUES , LO ESTARE ESPERANDO

James Howlett dijo...

EL MIO ES KARMATRON Y LOS TRANSFORMABLES, GRACIAS POR SUS COMENTARIOS.

James Howlett dijo...

ESPEREN LA SEGUNDA PARTE ESTO SE PONE INTERESANTE.

Saludos Marvelites*

Anónimo dijo...

Esta de peluches, esta muy bien se agradecen artículos como este, buen trabajo sigan así

Anónimo dijo...

QUE BUEN ARTICULO, MI PERSONAJE FAVORITO ES FANTOMAS Y KALIMAN

Anónimo dijo...

mi papa acaba de leer este post y que se destapa conmigo, el trabajaba en editorial novaro, el duro ahi 12 años,ya te imaginaras que de cuentitos o comics tengo ,nunca habiamos hablados de comics o historietas como dice el, estaremos al pendiente de la segunda parte,james saca un reportaje de el pantera con los heroes de marvel por ahi me acuerdo que habia algo de eso. Suerte vatos

Anónimo dijo...

INTERESANTE. UN SALUDO A TODOS LOS INTERESADOS EN EL MUNDO DE LAS HISTORIETAS, TENGO 46 AÑOS Y ESTE ARTICULO ME HIZO VIAJAR.

Raúl Pantoja dijo...

Bastante completo el articulo felicidades a los que lo realizarón. Como un apunte, Fantomas vio la luz por primera vez en nuestro pais en pepin en los años 30s y resurgio despues en novaro. Y si, mi comic favorito es Fantomas y Samurai.

Anónimo dijo...

Vientos raul!

KrotaZ dijo...

la neta el comic q mas melate es LOS SUPERMACHOS, seguido por los agachados.

Desgraciadamente LOS SUPERMACHOS solo tengo los primero 100 pero empastados y todo chingon gracas a mi padre tambien el tiene varios ejemplares de los agachados

James Howlett dijo...

De lujo!! Krotaz!

THUNDERCRACKER dijo...

LOS SUPERMACHOS DE RIUS ( HASTA EL NUMERO 100) Y EL PANTERA PERO NO EL DE TELEVISA SINO EL RANCHERO PAJON